Las naciones africanas están luchando contra el cambio climático con una Gran Muralla Verde de 8.000 kilómetros de largo destinada a combatir la desertificación de la región del Sahel, hogar de más de 100 millones de personas. El movimiento, que abarca todo el ancho del continente africano, tiene como objetivo restaurar 100 millones de hectáreas de tierra degradada, secuestrar 250 millones de toneladas de carbono y crear 10 millones de puestos de trabajo en las zonas rurales de África para 2030. Se extiende desde Senegal en el oeste hasta Yibuti en el este. El proyecto es el esfuerzo conjunto de 21 naciones africanas que se esfuerzan por restaurar la región y proteger los medios de subsistencia de las comunidades locales.
Extendiéndose entre el desierto del Sahara en el norte y la estepa sudanesa en el sur, la región del Sahel fue una vez una tierra verde, pero en los últimos 30 años, el área se vio gravemente alterada por sequías prolongadas debido al cambio climático, la agricultura excesiva y gestión de la tierra inadecuada, lo que se tradujo en escasez de recursos y migración masiva. Más del 80 por ciento de la tierra de la región ahora está degradada, lo que contribuye a las frecuentes condiciones de hambruna, ya que la mayoría de la población depende de la agricultura de secano para trabajar.
La Gran Muralla Verde promete ser un verdadero cambio de juego, brindando un futuro más brillante para la juventud rural en África y la oportunidad de revitalizar comunidades enteras. Puede unir a los jóvenes en torno a una ambición común y épica: "Hacer crecer una maravilla mundial del siglo XXI" a través de las fronteras y en toda África. - Monique Barbut, Secretaria Ejecutiva de la Convención de las Naciones Unidas para Combatir la Desertificación
El movimiento de la Gran Muralla Verde se lanzó oficialmente en 2007 bajo el liderazgo de la Unión Africana, pero la idea de un corredor verde se remonta a la década de 1970 cuando la región se vio afectada por sucesivas sequías, que degradaron severamente la tierra fértil y generaron un ciclo de pobreza en el área. Hoy, 21 naciones africanas colaboran en la Gran Muralla Verde, de las cuales se estima que se completó el 18 %. En Senegal se han plantado más de 12 millones de árboles, mientras que en Etiopía se han restaurado 15 millones de hectáreas. Las prácticas de recolección de agua de lluvia y el trabajo de las comunidades locales sustentarán la infraestructura verde. Los científicos aún debaten el impacto climático de este esfuerzo masivo.
La Gran Muralla Verde se trata de desarrollo; se trata de un desarrollo sostenible y climáticamente inteligente en todos los niveles - Elvis Paul Tangam, Comisionado de la Unión Africana para la Iniciativa de la Gran Muralla Verde del Sáhara y el Sahel.
